Las creencias limitantes son aquellas que nos hacen pensar de forma negativa sobre nosotras mismas y/o sobre lo que somos capaces de hacer. Suelen ser afirmaciones negativas que nos hacemos y que nos causan inseguridad y bloqueo. Suelen surgir a raíz de experiencias o situaciones que hemos vivido en el pasado y que han dejado huella en nuestro pensamiento.
Hay 3 tipos de creencias limitantes que clasificamos como creencias de capacidad, de posibilidad o de merecimiento.
Aquí tienes algunos ejemplos:
- Creencias limitantes de capacidad: ¿Seré capaz?
No soy una persona inteligente.
Me pongo nervioso al hablar con personas desconocidas.
Nunca sabré hablar bien el inglés a nivel profesional.
- Creencias limitantes de posibilidad: ¿Es posible?
No tengo dinero para tomarme unas vacaciones.
No tengo tiempo para estar con mi familia.
Conseguir un buen puesto hoy en día es complicadísimo.
- Creencias limitantes de merecimiento: ¿Me lo merezco?
Con mi pasado no tengo derecho a ser feliz.
No merezco que me quiera tanto.
Como no estudié cuando era joven, ahora debería…
En la menopausia y la pérdida de peso, es común que surjan creencias limitantes que nos dificulten el proceso. Sin embargo, estas creencias limitantes son solo eso: CREENCIAS. Si las aceptamos como verdades absolutas, pueden hacernos caer en la resignación y en la falta de motivación. Por eso, es importante trabajar en ellas y transformarlas en pensamientos más positivos y útiles.
10 ejemplos de creencias limitantes y la realidad:
- Creencia: “Ya no puedo perder peso debido a mi edad“. Realidad: La edad no es un factor determinante en la pérdida de peso. A medida que envejecemos, nuestro metabolismo puede disminuir ligeramente, pero esto no significa que no podamos perder peso. Si entrenamos la fuerza podremos mantener el porcentaje de masa muscular adecuado durante toda la vida.
- Creencia: “La menopausia causa aumento de peso“. Realidad: Si bien la menopausia puede contribuir al aumento de peso debido a los cambios hormonales y la disminución del metabolismo, no es la única causa y no todas las mujeres experimentan un aumento de peso durante la menopausia. No te bloquees ni te resignes.
- Creencia: “No puedo comer carbohidratos si quiero perder peso“. Realidad: Los carbohidratos son una fuente importante de energía y no deben eliminarse por completo de la dieta. La clave es elegir carbohidratos complejos y fibrosos, como frutas, verduras y granos enteros, en lugar de carbohidratos refinados y procesados.
- Creencia: “No necesito hacer ejercicio porque soy mayor”. Realidad: El ejercicio es importante para la salud en general y precisamente a partir de los 40 años es imprescindible para mantenerte con salud. Recuerda que te va a ayudar a controlar el peso, mejorar la salud cardiovascular y fortalecer los músculos y huesos.
- Creencia: “No puedo perder peso sin seguir una dieta extrema“. Realidad: Las dietas extremas pueden ser peligrosas para la salud y no son sostenibles a largo plazo. Suelen ser restrictivas, monótonas, aburridas y al dejarlas (porque eso no hay quien lo aguante) ocasionan el temido efecto rebote. En su lugar, se recomienda seguir una dieta equilibrada y saludable, con porciones adecuadas y alimentos variados.
- Creencia: “Debo reducir mi ingesta de calorías para perder peso”. Realidad: La reducción extrema de calorías puede llevar a una pérdida de peso rápida pero insostenible. Es muy probable que con la grasa también perdamos masa muscular. Si nuestra dieta es hipocalórica tendremos menos energía, peor humor y ningunas ganas de entrenar. Se recomienda una reducción moderada de calorías y entrenar la fuerza 3 días como mínimo a la semana para una pérdida de peso saludable y sostenible que mantenga nuestro flujo energético alto.
- Creencia: “No puedo comer después de las 6 pm“. Realidad: El momento de las comidas no es tan importante como la cantidad y la calidad de los alimentos que se consumen. Es importante evitar comer en exceso y elegir alimentos saludables en cualquier momento del día.
- Creencia: “Los alimentos bajos en grasa son siempre la mejor opción“. Realidad: Los alimentos bajos en pueden tener grasa más azúcar y otros aditivos para mejorar su sabor. Es importante leer las etiquetas de los alimentos y elegir opciones saludables y equilibradas. Tomaremos la versión entera y le daremos importancia a las grasas saludables (aguacate, AOVE, aceite de coco, semillas…)
- Creencia: “No puedo disfrutar de la comida mientras intento perder peso”. Realidad: La comida puede ser saludable, equilibrada y estar riquísima. Lo importante es darle la prioridad a la creatividad y no cocinar los alimentos siempre igual. Las especias y las diferentes cocciones serán tus aliadas. Es importante encontrar un equilibrio entre disfrutar de la comida y mantener una dieta saludable y equilibrada.
- Creencia: “No puedo perder peso sin tomar suplementos o pastillas para adelgazar“. Realidad: Los suplementos y pastillas para adelgazar pueden ser peligrosos para la salud y no son necesarios para perder peso de manera saludable y sostenible. La clave es unir los 4 pilares: Entreno de fuerza, alimentación saludable, descanso adecuado y gestión del estrés.
Aquí te traigo cinco consejos para trabajar tus creencias limitantes:
- Toma conciencia de tus pensamientos: Identifica cuáles son las creencias que te limitan y escríbelas. De esta forma, podrás analizarlas con más detenimiento y empezar a transformarlas.
- Busca pruebas que las desmientan: Si piensas que a cierta edad no se puede bajar de peso, busca casos de personas que lo hayan logrado. Esto te ayudará a darte cuenta de que tu creencia no es necesariamente cierta.
- Crea nuevas afirmaciones: Una vez que hayas desmontado tus creencias limitantes, puedes empezar a generar afirmaciones más positivas que te ayuden a avanzar. Por ejemplo, “tengo la capacidad de cambiar mi metabolismo a través de una alimentación saludable y el entreno de fuerza” o “estoy dispuesta a dar lo mejor de mí para conseguir mi objetivo”.
- Pide apoyo: Si sientes que estás estancada en tus creencias limitantes, no dudes en buscar ayuda. Un entrenador personal o un terapeuta pueden ayudarte a cambiar tus patrones de pensamiento. Recuerda que puedes contar conmigo y te acompaño.
- Recuerda tus motivaciones: Cuando te sientas desmotivada, recuerda por qué y, sobre todo, para qué decidiste empezar a trabajar en tu pérdida de peso. Piensa en los beneficios que esto te traerá y en cómo te sentirás cuando lo logres.
En conclusión, las creencias limitantes en la menopausia y la pérdida de peso pueden ser un obstáculo importante, pero podrán desaparecer con un correcto abordaje. Si tienes claro tu objetivo y caminas hacia él con los consejos adecuados, podrás transformar tus pensamientos.
Fuentes:
- Mindset: The New Psychology of Success, Carol S. Dweck.
- – https://www.mayoclinic.org/es-es/healthy-lifestyle/womens-health/in-depth/menopause-weight-gain/art-20046058
- – https://www.mayoclinic.org/es-es/healthy-lifestyle/womens-health/in-depth/menopause-weight-gain/art-20046058
1 Comment
Muy bueno Irene, gracias.